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Con el Decano de Facultad de Medicina, Dr. Luis Calegari

El Clínicas ya está cambiando

El Hospital de Clínicas sigue en la mira. Hace poco volvió a aparecer en los medios a partir de la propuesta de la designación como director del Dr. Conrado Bonilla. Muchas son las visiones que tratan de definir cuál es el camino para su completo reacondicionamiento y puesta al día. El decano de Facultad de Medicina asegura que se está trabajando y habla de notorios avances en la recuperación, más allá de los «gozos y sombras» del importante centro hospitalario.


por Fernando Beramendi Comencemos por los últimos acontecimientos aparecidos en la prensa.

Hacia fin de año, lo más notorio fue la propuesta del orden estudiantil de cubrir la dirección del Clínicas con una contratación. Concretamente había sido propuesto el Dr. Conrado Bonilla. Esto fue en el momento en que estaban a punto de ser aprobadas las bases para los llamados a concursos para la provisión titular definitiva del cargo de director y de uno de los cargos de director asistente.

El consejo resolvió estudiar esa posibilidad, tuvimos una serie de reuniones no sólo con el Dr. Bonilla, sino con otras personas que él indicaba como posibles para integrar un equipo junto a él para la gestión del hospital. Por distintas razones, que van desde la ocupación de algunas de esas personas que no tenían disponibilidad horaria, y otras de índole presupuestal, esta propuesta no se concretó.

El consejo se abocó a seguir en las líneas de decisiones que había pensado tomar, se aprobaron las bases y en este momento se están realizando los llamados a concursos. Son concursos de mérito y oposición para la provisión definitiva del cargo de director y de los dos cargos de director asistente administrativo y director asistente en lo médico asistencial.

Con esto, nosotros esperamos que a mitad de año se estén realizando los concursos y que estemos terminando el año con una dirección definitiva, que va a tener una doble misión.

¿Cuál es?

Por un lado, dirigir el hospital y ayudar a terminar de formular una propuesta sobre cómo va a ser toda la gestión.

Mientras tanto sigue el Dr. Alallón a cargo de la dirección. Estamos reforzando el cuerpo de gestión con algunos llamados a los cargos de coordinadores para el área de hospitalización y de asistencia externa y algún cargo más a nivel del cuerpo de dirección para reforzar la gestión hasta que estén los cargos definitivos.

Este año seguirá persistiendo la situación de pobreza y además sabemos que no hay rendición de cuentas, y que el año que viene tampoco porque recién se va a estar estudiando el presupuesto quinquenal, sin embargo contamos con los refuerzos que en su momento dé el Poder Ejecutivo, como los dio al final de 1998, para poder terminar el año en una situación de pobreza pero funcionando lo más plenamente posible.

¿Cómo se vive esa situación de crisis permanente?

En una situación de crisis crónica mantenida se trabaja y hay grupos que elaboran y que van creciendo y además se están produciendo hechos que, a su vez, sirven no sólo para mejorar netamente la calidad de los servicios, sino que también contribuyen a lograr recursos extrapresupuestales, que a su vez permitan mejorar la asistencia en esos servicios y en todo el hospital.

En ese contexto se va a inaugurar el centro de Hemodinamia, en el cual se estuvo trabajando todo el año pasado. Desde la mitad del año para adelante se inauguraron las nuevas obras del Centro de Nefrología y de Diálisis. Se han incorporado equipamientos nuevos en el área de Oftalmología.

Se va a trabajar fuertemente la farmacia hospitalaria, también en el aspecto de los medicamentos, no sólo en su compra sino también en su producción, que puede hacerse a través de la formación del farmacéutico.

La farmacia del hospital hoy está en manos de la Facultad de Química en un convenio con la Facultad de Medicina. Eso puede plantear salidas novedosas a lo que es el problema del medicamento o de determinados insumos químicos que se usan en Medicina, y en los meses de verano se estuvo trabajando en la recuperación del centro quirúrgico.

Ya se terminó la reforma de cuatro salas de cirugía y para el mes de abril está prevista la finalización de dos más. O sea que, a pesar de la situación de crisis crónica, se trabaja para mejorar la infraestructura del hospital y tender a una mejor calidad de la asistencia.

¿Esto genera cambios en la atención?

Sí. Se ha valorado muy bien cuáles son los puntos críticos del hospital. Había elementos críticos en la estructura edilicia, por la falta de mantenimiento diario y de higiene; sobre los alrededores se resolvió hacer los máximos esfuerzos para cambiar la apariencia del hospital, que yo creo que empeora su imagen más allá de lo que es real.

Siempre vemos que en el hospital hay dos hospitales: cuando uno va a las áreas funcionales, de internación, el hospital tiene cosas muy buenas y de repente hay espacios comunes que por el hecho de serlo se trasforman en tierra de nadie, y son espacios muy malos.

Está la decisión política de actuar sobre esos espacios comunes, como la entrada, los grandes pasillos, las escaleras de acceso al primer piso, donde circula gran cantidad de gente. Es lo que da la primera impresión para el que entra allí, especialmente para el que va a asistirse y le da la idea de deterioro, de suciedad, y que hay que cambiarla porque eso también es calidad de la asistencia, calidad de lo que uno le pueda aportar a quien está necesitándolo.

¿Qué pasa con el Proyecto Centro Médico?

Precisamente el otro aspecto es el proyecto de desarrollo del hospital. Estas cuestiones atienden al proyecto, mientras la Unidad Preparadora del Proyecto sigue formulando y desarrollando los estudios que pidió el BID. También la última carta intención que hizo el banco solicitaba que para comenzar a pensar en inversiones en la infraestructura del hospital, nosotros debíamos tener consolidado su cuerpo de gestión.

Nosotros estamos cumpliendo nuestra parte en ese acuerdo y en la medida en que ese cuerpo de dirección de gestión del hospital empiece a tener su consolidación, estaremos en condiciones de ir reclamando fondos del proyecto del BID para invertir directamente en el hospital.

¿Cuál es la situación concreta?

Está marchando con el cronograma que se estableció cuando la última misión de orientación en noviembre. Se está realizando una serie de estudios preparatorios. Nosotros estamos cumpliendo con nuestra cuota parte de cosas para seguir adelante.

¿Qué clima se respira en el Hospital de Clínicas en estos momentos?

Todavía sigue habiendo en varios sectores un pesimismo muy grande, sigue habiendo también sectores indiferentes a la situación y que se manejan por inercia. Pero lo que yo rescato son aquellos sectores del hospital que tienen la camiseta puesta y que trabajan día a día. Y eso pasa en todos los sectores: mantenimiento, enfermería, médicos, docentes, estudiantes.

Nosotros debemos dar señales claras o más claras de que se está caminando en la recuperación del Clínicas. Además, el proyecto también está caminando y hay expectativa en eso, esperamos que esos sectores más rezagados empiecen a cambiar y se unan al trabajo.

¿En un año hay director del Clínicas?

Sí, sí...

Un poco lento, ¿no?

Sí, pasaron demasiados años.

Es que los concursos en la Universidad son demasiado lentos en general.

Y este es especial porque es de oposición y tuvimos que pensarlo mucho y ver las particularidades, porque no es un cargo académico común. No es el profesor que llega a la cátedra después de una carrera docente. Aquí combina lo académico con la gestión. Pero el concurso de oposición será sobre el proyecto de desarrollo y organización del hospital. Eso nos va a ayudar mucho.

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