Foro sobre colegiación legal

«Es imprescindible una mayor comunicación con los sectores políticos»

por Armando Olveira

El encuentro se realizó en la sede de la Academia Nacional de Medicina y fue organizado por las asociaciones que han lanzado un proyecto marco de colegiación legal como «recurso para enfrentar la libre movilidad de universitarios en el Mercosur, y a fin de establecer reglas éticas para el ejercicio profesional».

Las asociaciones organizadoras habían dado a conocer en agosto pasado, un documento conjunto en el cual estuvieron de acuerdo en que el tema de la colegiación adquiere «especial relevancia en la perspectiva de la inminente movilidad internacional de profesionales universitarios dentro de la región, prevista por el Tratado de Asunción». El documento planteaba distintas situaciones y sugerencias y recuerda que desde mediados de siglo se han estudiado iniciativas tendientes a implantar un régimen de colegiación obligatoria.

La iniciativa se encuentra a estudio de los partidos políticos con representación parlamentaria, a la espera de su ingreso formal a una de las Cámaras.

Canabal: «el proyecto exige un estudio profundo»

Representando a la Agrupación Universitaria del Uruguay, el Dr. Rodolfo Canabal recordó que el primer intento de colegiación se remonta a 1941, por iniciativa del Colegio de Abogados. «Muy poco tiempo después se sumó al esfuerzo la Agrupación, por entenderlo una cuestión de principios universitarios», interpretó.

Canabal sostuvo que «como instrumento legal permitirá realizar un control real de los profesionales universitarios, a través de la matriculación obligatoria. También será sumamente útil para verificar que quien pretende ser matriculado no está afectado por factores que hagan incompatible tal ejercicio; para realizar el control ético en función de principios y normas estatuidos en un código y aplicar en caso de infracciones a los deberes éticos, las sanciones disciplinarias pertinentes previa garantía de defensa legal». Exhortó a los poderes públicos a que «estudien el tema en profundidad y aprueben un régimen de colegiación legal, cosa que no se ha hecho ante ninguna de las iniciativas anteriores, algunas con más de 50 años de antigüedad».

Se refirió a «la asimetría derivada de que la Argentina y Brasil poseen un estructurado régimen de colegiación y regulación legal de las profesiones universitarias. De esta forma, Uruguay y Paraguay quedan en desventaja frente a sus vecinos mayores, ya que verán facilitada su penetración bajo el régimen de libre intercambio del Mercosur».

Para Canabal la colegiación es «imprescindible». «Es inminente la posibilidad de que profesionales de otros países puedan ejercer libremente en Uruguay. Hecho que determina riesgos indudables, por la ausencia de controles fuera de la simple reválida del título, en los hechos no siempre eficaz».

Mazza: «necesidad impostergable»

El Dr. Milton Mazza, presidente de la Academia Nacional de Medicina, recordó que el proyecto de colegiación legal «se sustenta en la necesidad de establecer reglas éticas básicas para el control de la actividad de las profesiones universitarias».

La obligatoriedad de controles del ejercicio profesional se sustenta en que «la prestación a usuarios, destinatarios o clientes, hasta el momento carece de instrumentos eficaces para asegurar servicios correctos. Consecuentemente, la colegiación está destinada a amparar al consumidor en todos sus derechos». Para Mazza «la colegiación legal de los profesionales universitarios, y de los médicos en particular, es una necesidad impostergable. Por ello, bien vale la pena poner nuestro mayor esfuerzo».

Admitió que «la aprobación del proyecto conlleva un complejo proceso legal, político y filosófico, que compromete a universitarios, políticos, medios de comunicación, el Estado y la propia población en general».

Subrayó que «la Academia Nacional de Medicina está convencida del beneficio que supone la colegiación legal para todos los ciudadanos del país. Lo proclama, por saberse despojada de intereses sectoriales o personales, despojada de toda hipocresía ideológica y por sentir que se ha iniciado un proceso largo e irreversible de humanización de las relaciones profesionales».

«En este asunto están en juego intereses legítimos de los profesionales universitarios. La colegiación permitirá regular la actividad de los profesionales universitarios en una sociedad cada vez más compleja y en una región que se ha transformado en algo más que cuatro países vecinos; es hoy un sistema subcontinental», señaló. Desde el punto de vista del ejercicio, tiene como finalidad realizar un control real de los profesionales universitarios, a través de la matriculación obligatoria. Es útil para verificar que quien pretende ser matriculado no está afectado por factores que hagan incompatible tal ejercicio. Permite realizar el control ético en función de principios y normas estatuidos en un código y en caso de infracciones a los deberes éticos, aplicar sanciones disciplinarias previa garantía de defensa legal».

«La colegiación regula la actividad de los profesionales universitarios en una sociedad cada vez más compleja y en una región como el Mercosur, que se ha transformado en algo más que cuatro países vecinos, en un verdadero continente. Buscamos con este instrumento, el más digno, humano y racional ejercicio universitario, para beneficio de todos los miembros de la sociedad», sintetizó Mazza.

Giuria: «no a las patentes de corso»

Para el Dr. Frederick Giuria, representante del SMU, «ha llegado el momento de la unidad de todas las profesiones, en favor de esta iniciativa. Algo que comenzó a verse en la aprobación unánime alcanzada en la última asamblea de la Agrupación Universitaria».

Se presentó ante el auditorio como «un apasionado del tema colegiación profesional», por tratarse de «un objetivo perseguido desde hace más de medio siglo».

Defendió «la decisiva importancia» que tendrá la aprobación de una ley de colegiación «en favor de los esfuerzos que se hacen para lograr una mayor protección del consumidor. Es indudable que, cuanto más se controle la actividad profesional, mejores servicios recibirá la población».

«Es una cuestión muy importante y con varias puntas. A punto de cambiar de milenio, solamente tres países de Europa y América mantienen el triste privilegio de no tener colegios: Colombia, Paraguay y, lamentablemente, Uruguay.

No es solamente un problema jurídico, sino de política nacional. Es un tema que debiera preocupar al Estado y que llevará algún tiempo de discusión, técnica y política.

Lo primero es señalar lo importante que sería terminar con esa verdadera patente de corso que tiene todo profesional que se recibe sin una normativa que legisle su actividad y para que el consumidor tenga todas las garantías de excelencia del servicio que contrata», subrayó.

Giuria recordó que los médicos introdujeron en el Parlamento seis proyectos de ley de colegiación, a partir de 1951. «Todos murieron en el intento, cuando llegaron a algún despacho», sentenció.

Sostuvo que se sentía muy cercano «al Sindicato Médico, y a la profesión que ha tenido luchadores por la causa como el caso del recordado Fosalba».

Mogni: «lo peligroso es la ausencia de colegiación»

En representación de la Femi, el Dr. Ítalo Mogni afirmó que «el respeto y autoridad que representa el título universitario, debe estar sustentado en un código de ética profesional».

Señaló que «esta necesidad se profundiza por la pérdida de valores que existe en un mundo pragmático, que premia el éxito pasajero y el poder del tener. Surge así la competencia despiadada, muchas veces ajena a la ética, lo que nos obliga a ser cuidadosos de nuestras conductas».

«Por ello se necesita una legislación más consistente que los tribunales arbitrales de las asociaciones profesionales», anotó.

Para Mogni «no hay que tener miedo a la colegiación, porque mucho más peligroso es la ausencia de colegio».

«Los profesionales universitarios nos sentiremos más respetados si sustentamos nuestro ejercicio en un código ético regido por una ley nacional. Por ello la Femi apoya enfáticamente la iniciativa», sentenció.

Bergonzoni: «los políticos no han leído el proyecto»

El presidente de la Asociación de Escribanos del Uruguay (AEU), Prof. Héctor Bergonzoni, señaló que su sector adhiere «fervientemente» al proyecto, aunque cuenta con uno propio, ingresado al Parlamento en noviembre de 1997.

Recordó que los notarios uruguayos se rigen por tres instituciones que interactúan en el control del ejercicio profesional: Suprema Corte de Justicia, Asociación de Escribanos del Uruguay y Caja Notarial. «No obstante reclamamos una colegiación legal, por entenderla imprescindible para la unificación de criterios».

Afirmó que los escribanos «no temen ser una punta de lanza» frente a la «clara resistencia que ejerce el sistema político».

«La resistencia es real y muy fuerte, fundamentalmente porque los legisladores desconocen el contenido de los proyectos de colegiación», admitió.

Opinó que «no es cierto el supuesto riesgo de crear corporaciones medievales; por el contrario, un buen colegio profesional permitirá la modernización del ejercicio profesional».

Hackenbruch: «debe ser una propuesta equilibrada»

Para el Dr. Esteban Hackenbruch, dirigente del Partido Nacional, «un proyecto de colegiación equilibrado y realista, permitirá armonizar legislaciones de los cuatro países para que las oportunidades sean idénticas. De lo contrario, ocurrirán cosas tan absurdas como que brasileños y argentinos podrán ejercer libremente en nuestro territorio, pero que los uruguayos tengan prohibido el ejercicio en esos países».

El mayor aporte del proyecto «debe ser la protección del buen profesional universitario, frente a la perspectiva de un ejercicio sin control de pseudo universitarios provenientes de países vecinos. La propia realidad nos obligará a adoptar medidas de protección». Desde su punto de vista «será fundamental el equilibrio de la propuesta» y una «comunicación adecuada con los legisladores que deberán aprobarla en el Parlamento».

Basso: «somos optimistas»

Por el Encuentro Progresista participó del foro el Dr. Jorge Basso, quien señaló el interés demostrado por el presidente del sector, Dr. Tabaré Vázquez. «No hay una definición colectiva sobre el tema, pero el Dr. Vázquez se muestra especialmente preocupado por la aprobación del proyecto», dijo Basso.

«Traigo un mensaje claro: cuenten desde ya con la actitud positiva del Encuentro Progresista y con el optimismo de sus dirigentes vinculados al ámbito universitario», enfatizó. Para Basso «la colegiación tiene como finalidad realizar un control real de los profesionales universitarios, a través de la matriculación obligatoria. Será útil para realizar el control ético en función de principios y normas estatuidos en un código y aplicar en caso de infracciones a los deberes éticos para normatizar las sanciones disciplinarias pertinentes previa garantía de defensa legal y para verificar que el matriculado no está afectado por factores que hagan incompatible tal ejercicio», sentenció. Basso se mostró confiado en que «los poderes públicos estudiarán el tema y aprobarán dentro de un plazo razonable un régimen de colegiación legal, cosa que no se ha hecho ante ninguna de las iniciativas anteriores».

Barandiarán: «un ombudsman»

Para el representante del Nuevo Espacio, Cr. Gabriel Barandiarán, «el proyecto de colegiación profesional se justifica plenamente por los fuertes cambios ocurridos en los últimos años, dentro del ámbito universitario».

«En nuestro país, hasta hace muy poco había una sola universidad, estatal y centralizadora de la formación de profesionales. El solo hecho de la aparición de distintos centros universitarios privados, con distinta calidad de enseñanza, obliga a la unificación de criterios de control ético del ejercicio», agregó. Barandiarán sostuvo que «un organismo colegiado debe atender tres puntos básicos: la expedición del título, el estándar de calidad de la enseñanza y el ejercicio propiamente dicho. Con ello quiero decir que un buen colegio profesional deberá estar atento a la posibilidad de casos de corrupción, hoy tan comunes en nuestra sociedad».

Desde su punto de vista, «previo a la aprobación de una ley de colegiación, debe ser atendido el punto de vista de la sociedad. En mi caso, veo la necesidad de saber qué espera el ciudadano común de un contador público. Para ello, tengo la intención de proponer la fórmula del ombudsman, como agente receptor de iniciativas».

Cougett: "lastima ser excepción de la regla"

El Dr. Noé Cougett, miembro responsable de la Comisión de Publicaciones del SMU recordó que "desde hace muchos años se vienen presentando proyectos sobre colegiación... ya lo han dicho los expositores, históricamente ha habido mucha gente que defendió y defiende la necesidad de colegiar las profesiones universitarias. Muchos de ellos ya no están".

"Como médico reconozco que nuestra profesión, cuando hay un error, puede llegar a la muerte de una persona. Si hay malos médicos, matamos gente. Y eso nosotros no lo queremos. Y la población no está en condiciones de saber quién es bueno y quién es malo. Solo nosotros podemos saberlo". En tal sentido reconoció que "hay malos médicos porque no estudian, porque se olvidaron de estudiar y mantenerse al día. Actualmente, cada tres años se duplica todo el conocimiento... Pero también hay otros que saben muy bien lo que están haciendo, pero ponen los intereses económicos por encima de la vida del paciente que están tratando...

Nuestro problema ético es que tenemos que poner freno al mal ejercicio de la medicina. Sería muy importante saber quién es quién. Y además limpiar la profesión". En el ámbito de las profesiones, existe un convencimiento mayoritario de la necesidad de colegiación profesional. Personalmente, no me interesa el Mercosur... lo que me preocupa, me lastima, es que somos la excepción de la regla. El problema es anterior al Mercosur. Es como discutir si debemos darle o no vacunas a la población".

"Pero no es culpa de las asociaciones profesionales, ni de los gremios. La culpa de esta ausencia se ubica en otro espacio... donde no creo que se les pague para hablar, sino para legislar y administrar bien, en tiempo y forma. Como uruguayo me lastima ser la excepción de la regla", sentenció Cougett.