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por Armando Olveira
Dr. Tito Pais
«El CASMU tiene futuro»
El Dr. Tito Pais, presidente de la Junta Directiva del CASMU, admitió que «la Institución enfrenta una dura crisis» pero dijo también que «la idea de Fosalba sigue siendo tan viable como en su mejor época. Los problemas se superarán con una estrategia de relacionamiento interno y externo».
El CASMU tiene una proyección interesante, que podemos hacer realidad si no nos empantanamos en la crisis actual. Para ello es imprescindible el desarrollo de una estrategia que permita mejorar la calidad de atención y las finanzas.
Pais es Grado 4 de Clínica Pediátrica en el Programa Docente en Comunidad de la Facultad de Medicina. «Es imprescindible aportar elementos estratégicos a temas sustanciales como la concentración hospitalaria, la promoción de la medicina zonal y los acuerdos intermutuales», subrayó.
Dr. Pais, no ignora que asume un cargo que es considerado muy difícil y controvertido desde hace algunos años.
La Institución enfrenta una crisis que no es distinta a la del conjunto del sistema de asistencia. Desde nuestro punto de vista el concepto de crisis no debe ser tomado sólo en el sentido negativo, sino como idea de cambio. Uno sabe como pediatra que un parto siempre es doloroso.
No creo que exista un individuo que se anime a aceptar un desafío tan importante y con tantas repercusiones personales y colectivas. No estoy loco ni soy tonto, tengo el total convencimiento de que el CASMU es viable.
Pero hay opiniones contrarias a la suya, mucho menos optimistas.
Basamos esta idea en la gran cantidad de actividades que desarrolla y en que sigue siendo la mayor institución del sector. Es cierto que hay dificultades, que tienen causas internas tan considerables como las externas. ¿O alguien duda de que muchos de los problemas se generan dentro del CASMU?
También es imprescindible recordar que la administración saliente ha sido muy buena. En dos años se pasó de un déficit insoportable de 17% a uno mucho más tolerable situado en 6%. No es lo mejor, pero se hacen esfuerzos para equilibrar las finanzas, y se notan en la práctica.
Hoy por hoy, en junio de 1997, se pueden pagar salarios y aguinaldos. De aquí en adelante lo fundamental es concretar logros que yo llamaría estratégicos.
Concretar logros estratégicos
¿Podría exponerlos sintéticamente?
Es fundamental finalizar el proyectado centro de alta complejidad que podríamos llamar Cinco, conformado por el Sanatorio Nº 2, el Policlínico y el nuevo sanatorio. De esta forma se dará inicio a un nuevo concepto de atención hospitalaria, como siempre liderada por el CASMU.
La gran fuerza de la Institución estuvo sustentada, históricamente, en la promoción y coordinación de la actividad descentralizada, en los médicos de zona.
La estrategia también deberá dirigirse a la coordinación de servicios entre las entidades del Plenario Intermutual.
Un muy buen ejemplo es la concreción del puente que se proyecta para unir el Sanatorio Nº 4 con la sede de Impasa. Esta conexión será muy útil, por ejemplo en la atención de pacientes cardiacos que serán llevados en su propia cama desde un cti hasta la sala de operaciones.
No obstante esos proyectos conjuntos, la competencia entre las mutualistas es cada vez mayor.
No hay dudas de que la competencia se ha incrementado en los últimos años. Eso obliga a redoblar esfuerzos en la concreción de estrategias internas de crecimiento y de acuerdos con entidades que apoyen nuestra línea de trabajo. Creo que ése es uno de los grandes desafíos de la próxima administración: aportar elementos estratégicos a temas sustanciales como la concentración hospitalaria, la promoción de la medicina zonal y los acuerdos intermutuales. Ya se hacen cosas muy interesantes, como talleres de relaciones humanas, formación de técnicos y mejoras de los servicios.
Publicitar y promover
Pero los socios no se enteran. Pensamos, por ejemplo, en la apuesta publicitaria fuerte que hacen la Española o Casa de Galicia.
Es cierto, pero hay que partir de la base de que ellos representan una propuesta diferente. Se sabe que el papel del CASMU en el sistema mutual es distinto al de esas empresas. Creo que es imprescindible hacer una mayor apuesta a la promoción y publicidad de nuestros logros. Quizá no se sepa que el padrón social de las mutualistas cayó globalmente 5% en los últimos años. Pero de ese total quien menos perdió fue el CASMU, apenas con 2%. Con ello no quiero decir que la publicidad no sea importante, por el contrario, personalmente tengo muy claro que es imprescindible invertir fuerte en ese sentido.
Un rubro que parece interesar al CASMU es la venta de servicios.
Es una labor esencial para confirmar la mejora financiera, técnica e institucional. Tenemos el ejemplo de la venta de servicios de laboratorio por un acuerdo firmado con ancap. Éste es un rubro potencialmente enorme, si consideramos el éxito de esa experiencia. No debemos olvidar que la Institución cuenta con el laboratorio clínico mayor del país y con el centro de fisiatría más completo.
En los últimos meses se ha multiplicado la venta de servicios a instituciones públicas y privadas.
Se ha discutido mucho sobre la situación financiera del CASMU. ¿Cómo piensa que se encarará este tema sustancial?
Es imprescindible aclarar que la gestión financiera ha mejorado en los últimos dos años. Por ello seguiremos en el camino actual. Intentaremos unir el mejoramiento de la gestión con una optimación de la apuesta estratégica que permitirá el incremento de ingresos. Una mejor gestión hospitalaria, una mayor descentralización y una correcta racionalización nos permitirán crecer y volver a ser la gran institución que soñara Fosalba.
El CASMU no ha perdido base de sustento técnica ni viabilidad empresarial. Y no lo digo como una declaración de deseos. Hay un informe de auditoría externa de la consultora internacional Coopers & Librand, que demuestra la viabilidad del CASMU.
Autoridades legítimas
¿Por qué piensa que hubo una votación tan baja?
Bajó el porcentaje, es cierto, pero no estoy de acuerdo con la idea que sustentan algunos compañeros, a los que respeto tanto personal como gremialmente. Que no se haya llegado a 50% del padrón electoral no invalida la elección ni sus resultados. Basta comparar nuestro resultado con el obtenido por un gremio como AFCASMU. Debemos tener en cuenta que el voto no es obligatorio y que la participación gremial ha cambiado.
Creo que la caída del porcentaje se explica por la fragmentación. El aumento dramático de las agrupaciones provocó una baja en la polarización. Y la polarización da lugar siempre a un aumento de la votación.
¿Un porcentaje de votos tan exiguo no cuestiona la legitimidad de las autoridades entrantes?
Hay que considerar que Fosalba obtuvo 4% más de votos que la agrupación que quedó en segundo lugar. No podemos decir que la diferencia no exista. ¿Acaso se puede invalidar la legitimidad del gobierno nacional porque haya sacado una diferencia inferior a 1% en las últimas elecciones? ¿Se puede cuestionar la validez del resultado de ese acto electoral? Creo que la comparación vale, porque a nadie se le ocurriría objetar la legalidad de Sanguinetti.
Solymar fue desactivado
¿Las denuncias por el caso Solymar influyeron en esta baja votación?
Quizá influyó la forma como se presentó el caso desde la oposición, pero no el episodio en sí mismo. La historia de Solymar ha sido desactivada oportunamente por la Junta saliente enviando los antecedentes al Consejo Arbitral. No creo que se pueda hacer más en el plano gremial.
Lo importante ahora es la valoración empresarial que debe hacer el CASMU de sus emprendimientos en el interior.
La Institución no dejará de ser la mayor del mutualismo uruguayo. La base de sustento seguirá siendo la misma (médicos, funcionarios y afiliados), muy por encima del negocio de la salud.
Con seguridad, hay muchos que tienen interés en ver al CASMU caído porque podrían imponer su idea económica sobre nuestra concepción humana y asistencial.
Lo concreto, lo sustancial, es que la Institución crecerá en la medida que nos planteemos una estrategia viable.
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