Desafíos y perspectivas de la formación de especialistas en Uruguay

Cada año, el 1° de abril marca el inicio de una nueva etapa para las médicas y los médicos en Uruguay: comienzan su formación como especialistas a través de residencias médicas o posgrados.

Desafíos y perspectivas de la formación de especialistas en Uruguay

lunes 31 de marzo de 2025

Este proceso —que inicia mucho antes con la preparación de la Prueba Única de Residencias (PUR) que se realiza en el ámbito de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República (UDELAR)— es un hito significativo en la carrera de cualquier profesional de la salud. Sin embargo, es imperativo analizar y debatir las condiciones laborales y formativas a las que se enfrentan nuestras y nuestros colegas en formación.

Un estudio reciente realizado por el Colegio Médico del Uruguay y la Unidad de Salud Ocupacional de la Facultad de Medicina reveló que, cuatro de cada diez residentes médicos trabajan 55 horas semanales, o más, dentro de su formación, a menudo en un ambiente exigente y con escaso descanso. Esta carga horaria, sumada al multiempleo necesario para alcanzar una remuneración adecuada, plantea serias preocupaciones sobre el bienestar físico y mental de los residentes.

Las condiciones laborales actuales han llevado a una creciente incidencia del síndrome de burnout entre colegas residentes. Varios estudios (*), —alguno de ellos publicado en la Revista Médica del Uruguay— dan cuenta de porcentajes altos de grupos de médicos y residentes que presentaban este síndrome, caracterizado por agotamiento emocional, despersonalización y una disminución del logro personal. Este dato subraya la necesidad urgente de abordar los factores que contribuyen al desgaste profesional en el ámbito de la salud.

Es fundamental que los especialistas en formación conozcan y ejerzan sus derechos y deberes durante su formación. La Ley N° 19.301 y su reglamentación establecen, entre otros puntos, que después de completar los dos primeros años de residencia, los médicos deben realizar una pasantía en servicios de salud del interior del país, promoviendo así una distribución más equitativa de los profesionales de la salud. Asimismo, se contemplan las licencias y otros derechos que tienen como trabajadores. 

Para garantizar el cumplimiento de estos derechos y fortalecer la cobertura sanitaria en todo el país, resulta clave repensar la distribución geográfica de los cargos de residencia, asegurando una supervisión adecuada y alineándolos con las necesidades del sistema de salud.

Queremos puntualizar que los residentes tienen el derecho a exigir una supervisión adecuada de sus actividades; y deben documentar y notificar formalmente situaciones en las que esto no suceda. No son contemplados, ni deben serlo, como dotación en los servicios donde desempeñan sus cargos.

Frente a estas problemáticas, es fundamental fortalecer el diálogo entre las sociedades científicas, la Facultad de Medicina y las instituciones de salud para mejorar las condiciones laborales y formativas. Esto incluye la revisión de las cargas horarias, la implementación de medidas para prevenir el burnout y garantizar que los derechos y deberes de los médicos en formación sean respetados y promovidos.

La formación de especialistas es vital para el sistema de salud uruguayo. Por ello, asegurar condiciones dignas y adecuadas para nuestros colegas no sólo beneficia a estos profesionales, sino que también repercute positivamente en la calidad de la atención brindada a la población.

(*) ScieloLA referencia